Están paralizadas las obras de siete hospitales del Bicentenario.
El Gobierno ya destinó $ 1300 millones por medio del PAMI, pero los establecimientos no se terminaron; sólo dos podrían estar listos en 2015; la Presidenta hizo varios anuncios de las obras.
Seis años después del estridente anuncio que realizó la presidenta Cristina Kirchner, y pese a los gastos multimillonarios que ya se hicieron hasta el momento, aún no funciona ninguno de los siete hospitales del Bicentenario que el Estado financia a través del PAMI.
Los centros de salud en construcción paralizados y sin posibilidades de inaugurarse hasta el próximo año están distribuidos en la provincia de Buenos Aires -dos en La Matanza (Rafael Castillo y Laferrère), en Esteban Echeverría, Ituzaingó, Escobar y General Rodríguez (en esta última localidad los trabajos nunca comenzaron)- y en Entre Ríos.
"Los hospitales del Bicentenario no están incluidos en el presupuesto 2015; es más, se contempla una menor asignación al área de salud", sostuvo Walter Martello, ex diputado bonaerense de la Coalición Cívica que pasó al Frente Renovador.
Según el dirigente, para que funcione un servicio mínimo haría falta una inversión adicional de 650 millones de pesos. "En el caso de que la promesa fuera a concretarse en los cinco hospitales de la provincia, se necesitarían más de 3000 millones de pesos", explicó Martello, que usó como comparativo lo que el gobierno de Daniel Scioli presupuestó para el próximo ejercicio del Hospital San Martín de La Plata.
El convenio para la realización de los hospitales del Bicentenario incluye tres actores: los municipios, que donaron los predios; el Ministerio de Planificación, que realizó las licitaciones, y el Instituto de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (Inssjp), conocido como el PAMI, que es el que paga la obra. En los últimos seis años el PAMI destinó sólo para cuatro hospitales -en Esteban Echeverría, Ituzaingó, La Matanza y Escobar- unos 1300 millones de pesos.
"Los hospitales se planearon para dar respuesta a una necesidad de camas en puntos estratégicos del país, y se iban a inaugurar en 2010. Una parte de las camas estarían reservadas a los afiliados al PAMI. Pero la realidad es que hoy los abuelos tienen que ir a hospitales donde no hay médicos para atenderlos. Está muy lindo hacer hospitales, pero lo importante es que funcionen", dijo a la nacion la legisladora porteña por Confianza Pública Graciela Ocaña, que fue titular del organismo entre 2004 y 2007.
Uno de los casos emblemáticos es el de Ituzaingó, tierra donde manda desde 1995 el histórico Alberto Descalzo. Según lo publicado en el Boletín del Instituto, el PAMI abonó a Creaurban SA un total de 323 millones de pesos. El monto original era de $ 198.202.704,31, pero la empresa de los hermanos Ángelo y Fabio Calcaterra solicitó tres readecuaciones de precios por $ 80.212.634,43, $ 18.775.378,19 y $ 24.895.734,71; en todos los casos la aprobación la decidió el titular del Instituto, Luciano Di Cesare.
Otro ejemplo que muestra el descontrol de gastos es la obra en Esteban Echeverría. El intendente kirchnerista Fernando Gray cedió el predio en el que funcionaba el antiguo frigorífico Monte Grande, entre las calles San Martín, General Rondeau, Jorge Miles y Esteban Echeverría, para la construcción de 22.332,44 m2. La obra, que comenzó en agosto de 2011, ya lleva gastados unos $ 300 millones, pero no se terminó. Fue adjudicada en 2009 por $ 199.875.000 a la firma Caputo. En abril de 2011, unos días antes de que se suscribiera el acta de comienzo de obra, la contratista pidió la "redeterminación de precios" del contrato. Es decir que antes de poner un ladrillo el PAMI le reconoció un aumento por $ 60.082.425. Tiempo después logró otras dos readecuaciones por 21 y 32 millones de pesos, respectivamente. Las readecuaciones de precios están presentes en todas las obras.
En La Matanza, los dos centros de salud materno-infantil están casi finalizados. En ambos se invirtieron más de 200 millones de pesos, siempre financiado por el PAMI.
Entre Ríos
En Entre Ríos el panorama es similar. El gobierno de Sergio Urribarri afirma que el hospital que construye el PAMI en Paraná podría estar terminado en junio del año próximo, y asegura que ya está construido en un 60%. Sin embargo, las obras se encuentran prácticamente paralizadas y la parte construida es poco más que una carcasa que pareciera distar bastante de ser más de la mitad de lo que será un hospital.
Esto ocurre en medio de denuncias sobre el deficiente servicio, según publicó la nacion hace dos semanas, que el organismo presta a los 4.500.000 afiliados que tiene. Este medio se comunicó con el PAMI, pero desde el organismo no respondieron los requerimientos.
"Todo es un curro. Estamos pagando algo que no corresponde. Desde que nos hicimos cargo de estos hospitales, cada vez hay menos plata para los abuelos. Los trabajadores del PAMI estamos preocupados; una vez que se vaya esta gestión no quedará nada", sostuvo a la nacion un trabajador del organismo que pidió reserva de nombre para evitar represalias.
La presentación del anuncio se hizo con toda la pompa y la liturgia kirchneristas. Era una fecha emblemática para el Gobierno, el 17 de octubre de hace seis años. Ése fue el día que eligió la Presidenta para anunciar la licitación para la construcción de siete nuevos hospitales con la promesa de que estarían finalizados en 2010.
Poco más de un año después, más precisamente el 15 de diciembre de 2009, la mandataria anunció en la Casa Rosada el comienzo de obra de los hospitales. Pero ahí no se agotaron los actos de anuncios. El 7 de octubre de 2011, en La Matanza, Cristina Kirchner "exponía la obra" y decía que faltaba "un poquito para hacer todo lo de adentro". El "poquito" tiempo que auguró la Presidenta ya lleva tres años de espera.
Fuente: La Nación
Seis años después del estridente anuncio que realizó la presidenta Cristina Kirchner, y pese a los gastos multimillonarios que ya se hicieron hasta el momento, aún no funciona ninguno de los siete hospitales del Bicentenario que el Estado financia a través del PAMI.
Los centros de salud en construcción paralizados y sin posibilidades de inaugurarse hasta el próximo año están distribuidos en la provincia de Buenos Aires -dos en La Matanza (Rafael Castillo y Laferrère), en Esteban Echeverría, Ituzaingó, Escobar y General Rodríguez (en esta última localidad los trabajos nunca comenzaron)- y en Entre Ríos.
"Los hospitales del Bicentenario no están incluidos en el presupuesto 2015; es más, se contempla una menor asignación al área de salud", sostuvo Walter Martello, ex diputado bonaerense de la Coalición Cívica que pasó al Frente Renovador.
Según el dirigente, para que funcione un servicio mínimo haría falta una inversión adicional de 650 millones de pesos. "En el caso de que la promesa fuera a concretarse en los cinco hospitales de la provincia, se necesitarían más de 3000 millones de pesos", explicó Martello, que usó como comparativo lo que el gobierno de Daniel Scioli presupuestó para el próximo ejercicio del Hospital San Martín de La Plata.
El convenio para la realización de los hospitales del Bicentenario incluye tres actores: los municipios, que donaron los predios; el Ministerio de Planificación, que realizó las licitaciones, y el Instituto de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (Inssjp), conocido como el PAMI, que es el que paga la obra. En los últimos seis años el PAMI destinó sólo para cuatro hospitales -en Esteban Echeverría, Ituzaingó, La Matanza y Escobar- unos 1300 millones de pesos.
"Los hospitales se planearon para dar respuesta a una necesidad de camas en puntos estratégicos del país, y se iban a inaugurar en 2010. Una parte de las camas estarían reservadas a los afiliados al PAMI. Pero la realidad es que hoy los abuelos tienen que ir a hospitales donde no hay médicos para atenderlos. Está muy lindo hacer hospitales, pero lo importante es que funcionen", dijo a la nacion la legisladora porteña por Confianza Pública Graciela Ocaña, que fue titular del organismo entre 2004 y 2007.
Uno de los casos emblemáticos es el de Ituzaingó, tierra donde manda desde 1995 el histórico Alberto Descalzo. Según lo publicado en el Boletín del Instituto, el PAMI abonó a Creaurban SA un total de 323 millones de pesos. El monto original era de $ 198.202.704,31, pero la empresa de los hermanos Ángelo y Fabio Calcaterra solicitó tres readecuaciones de precios por $ 80.212.634,43, $ 18.775.378,19 y $ 24.895.734,71; en todos los casos la aprobación la decidió el titular del Instituto, Luciano Di Cesare.
Otro ejemplo que muestra el descontrol de gastos es la obra en Esteban Echeverría. El intendente kirchnerista Fernando Gray cedió el predio en el que funcionaba el antiguo frigorífico Monte Grande, entre las calles San Martín, General Rondeau, Jorge Miles y Esteban Echeverría, para la construcción de 22.332,44 m2. La obra, que comenzó en agosto de 2011, ya lleva gastados unos $ 300 millones, pero no se terminó. Fue adjudicada en 2009 por $ 199.875.000 a la firma Caputo. En abril de 2011, unos días antes de que se suscribiera el acta de comienzo de obra, la contratista pidió la "redeterminación de precios" del contrato. Es decir que antes de poner un ladrillo el PAMI le reconoció un aumento por $ 60.082.425. Tiempo después logró otras dos readecuaciones por 21 y 32 millones de pesos, respectivamente. Las readecuaciones de precios están presentes en todas las obras.
En La Matanza, los dos centros de salud materno-infantil están casi finalizados. En ambos se invirtieron más de 200 millones de pesos, siempre financiado por el PAMI.
Entre Ríos
En Entre Ríos el panorama es similar. El gobierno de Sergio Urribarri afirma que el hospital que construye el PAMI en Paraná podría estar terminado en junio del año próximo, y asegura que ya está construido en un 60%. Sin embargo, las obras se encuentran prácticamente paralizadas y la parte construida es poco más que una carcasa que pareciera distar bastante de ser más de la mitad de lo que será un hospital.
Esto ocurre en medio de denuncias sobre el deficiente servicio, según publicó la nacion hace dos semanas, que el organismo presta a los 4.500.000 afiliados que tiene. Este medio se comunicó con el PAMI, pero desde el organismo no respondieron los requerimientos.
"Todo es un curro. Estamos pagando algo que no corresponde. Desde que nos hicimos cargo de estos hospitales, cada vez hay menos plata para los abuelos. Los trabajadores del PAMI estamos preocupados; una vez que se vaya esta gestión no quedará nada", sostuvo a la nacion un trabajador del organismo que pidió reserva de nombre para evitar represalias.
La presentación del anuncio se hizo con toda la pompa y la liturgia kirchneristas. Era una fecha emblemática para el Gobierno, el 17 de octubre de hace seis años. Ése fue el día que eligió la Presidenta para anunciar la licitación para la construcción de siete nuevos hospitales con la promesa de que estarían finalizados en 2010.
Poco más de un año después, más precisamente el 15 de diciembre de 2009, la mandataria anunció en la Casa Rosada el comienzo de obra de los hospitales. Pero ahí no se agotaron los actos de anuncios. El 7 de octubre de 2011, en La Matanza, Cristina Kirchner "exponía la obra" y decía que faltaba "un poquito para hacer todo lo de adentro". El "poquito" tiempo que auguró la Presidenta ya lleva tres años de espera.
Fuente: La Nación