Conclusiones de la reunión con Aguas del Norte
Luego de la reunión entre los directivos de Cosaysa, vecinos de 6 barrios capitalinos y los Concejales del Partido Obrero, el presidente del bloque Arturo Borelli sostuvo: “Es claro que el problema es la desinversión y no la falta de lluvia. A regañadientes el gobierno reconoce que sólo un sistema precario y primitivo puede ser tan dependiente de las precipitaciones. No hay obras para proveerse de pozos alternativas; el gobierno va muy por atrás de las necesidades sociales y las posibilidades geográficas”.
Los diputados y concejales del PO criticaron que sólo se destine 100 millones del presupuesto provincial para obras hídricas cuando tendremos un aumento de la recaudación por el impuestazo de hace un mes y por la inflación. Denunciaron que el gobierno habla de desinversión “crónica” pero son los mismos que permitieron que la romerista Aguas de Salta se fueran impunemente ante la estafa perpetrada a los vecinos.
En tal sentido el concejal Rodrigo Tolaba desestimó categóricamente algunas explicaciones dadas por Aguas del Norte en las que se cargaba la responsabilidad en los propios vecinos: “Cosaysa culpa a los asentamientos pero la falta de planificación es responsabilidad de este y del anterior gobierno, que mandaron a la gente a vivir en el límite con Cerrillos encareciendo los servicios, mientras destinan las mejores tierras a la especulación y a edificios de altura sin factibilidad de agua”. Luego Tolaba polemizó: “Las familias de Salta ocupan sólo el 8% del agua brindada por la empresa, el 40% se va en fallas de la empresa y el resto es de uso empresarial. Culpar a las familias por la falta de agua es una estrategia desviacionista”.
Los concejales del PO señalaron que continuaran haciendo reuniones en los barrios, fortaleciendo la iniciativa popular y reclamando mayores inversiones. Borelli finalizó: “Los vecinos no pueden seguir en esta situación ni supeditarse a la lógica empresaria de la ganancia. El servicio de agua es el derecho básico y no puede ser un negocio como lo plantean tanto este como el anterior gobierno de Romero”.
Los diputados y concejales del PO criticaron que sólo se destine 100 millones del presupuesto provincial para obras hídricas cuando tendremos un aumento de la recaudación por el impuestazo de hace un mes y por la inflación. Denunciaron que el gobierno habla de desinversión “crónica” pero son los mismos que permitieron que la romerista Aguas de Salta se fueran impunemente ante la estafa perpetrada a los vecinos.
En tal sentido el concejal Rodrigo Tolaba desestimó categóricamente algunas explicaciones dadas por Aguas del Norte en las que se cargaba la responsabilidad en los propios vecinos: “Cosaysa culpa a los asentamientos pero la falta de planificación es responsabilidad de este y del anterior gobierno, que mandaron a la gente a vivir en el límite con Cerrillos encareciendo los servicios, mientras destinan las mejores tierras a la especulación y a edificios de altura sin factibilidad de agua”. Luego Tolaba polemizó: “Las familias de Salta ocupan sólo el 8% del agua brindada por la empresa, el 40% se va en fallas de la empresa y el resto es de uso empresarial. Culpar a las familias por la falta de agua es una estrategia desviacionista”.
Los concejales del PO señalaron que continuaran haciendo reuniones en los barrios, fortaleciendo la iniciativa popular y reclamando mayores inversiones. Borelli finalizó: “Los vecinos no pueden seguir en esta situación ni supeditarse a la lógica empresaria de la ganancia. El servicio de agua es el derecho básico y no puede ser un negocio como lo plantean tanto este como el anterior gobierno de Romero”.