El Bloque del PARTIDO OBRERO rechazará el Proyecto de Presupuesto de Corimayo
Porque, como el presupuesto provincial, le transfiere el costo de la crisis a los trabajadores.
Si analizamos la masa de ingresos de origen municipal, el 90 % está conformado por los impuestos y tasas que pagan los frentistas por ser dueños de una vivienda única, por la cual no lucran; o de un auto familiar. En tanto que las grandes producciones que se realizan en la región como la tabacalera, no paga Actividades Económicas como paga cualquier kioskero. (El único impuesto que pagan es el Inmobiliario Rural, completamente desactualizado en comparación al precio actual de la tierra).
El costo de la crisis además, se descarga sobre una población con sueldos muy por debajo de la canasta familiar: obreros rurales, que tienen ingresos estacionales como los del tabaco. Empleados públicos, docentes, municipales, con sueldos que han perdido su poder adquisitivo con respecto a la inflación, como resultado de la política de cepo salarial de Urtubey y Corimayo.
Lejos de proteger a los trabajadores, este presupuesto contiene el impuestazo del 50 % de Corimayo, y se le suma el impuestazo que acaba de realizar Urtubey sobre Actividades Económicas, que luego el comerciante transferirá a los precios.
Con una orientación política opuesta, el Partido Obrero ha presentado en la Cámara de Diputados 2 proyectos: uno de revalúo del Impuesto Inmobiliario Rural sobre los 2 millones de has. que producen productos exportables en la provincia; otro, para que ningún municipio pague menos que el salario mínimo nacional oficial (y que si es necesario sea solventado por la provincia).
Rechazamos, además, no sólo el proyecto de Corimayo sino también el que presentarán los concejales de la oposición, porque mantiene el impuestazo contra los trabajadores y la clase media cerrillana. En este punto no tienen diferencias ambos proyectos.
Presentamos un pedido de informe, en el marco del tratamiento del Presupuesto, a la presidencia del CD, para que la Intendencia presente el padrón de los grandes contribuyentes del municipio, así como las exenciones de impuestos con que se los beneficia. Sin embargo, el presidente Torres, con la complicidad de los concejales de la Comisión de Hacienda, ha rehusado enviar el pedido de informes a la Intendencia para obligar a Corimayo a informarnos.
En defensa del bolsillo del trabajador, rechazamos este presupuesto y el próximo año exigiremos la discusión de la Ordenanza tributaria y la derogación del impuestazo.
Si analizamos la masa de ingresos de origen municipal, el 90 % está conformado por los impuestos y tasas que pagan los frentistas por ser dueños de una vivienda única, por la cual no lucran; o de un auto familiar. En tanto que las grandes producciones que se realizan en la región como la tabacalera, no paga Actividades Económicas como paga cualquier kioskero. (El único impuesto que pagan es el Inmobiliario Rural, completamente desactualizado en comparación al precio actual de la tierra).
El costo de la crisis además, se descarga sobre una población con sueldos muy por debajo de la canasta familiar: obreros rurales, que tienen ingresos estacionales como los del tabaco. Empleados públicos, docentes, municipales, con sueldos que han perdido su poder adquisitivo con respecto a la inflación, como resultado de la política de cepo salarial de Urtubey y Corimayo.
Lejos de proteger a los trabajadores, este presupuesto contiene el impuestazo del 50 % de Corimayo, y se le suma el impuestazo que acaba de realizar Urtubey sobre Actividades Económicas, que luego el comerciante transferirá a los precios.
Con una orientación política opuesta, el Partido Obrero ha presentado en la Cámara de Diputados 2 proyectos: uno de revalúo del Impuesto Inmobiliario Rural sobre los 2 millones de has. que producen productos exportables en la provincia; otro, para que ningún municipio pague menos que el salario mínimo nacional oficial (y que si es necesario sea solventado por la provincia).
Rechazamos, además, no sólo el proyecto de Corimayo sino también el que presentarán los concejales de la oposición, porque mantiene el impuestazo contra los trabajadores y la clase media cerrillana. En este punto no tienen diferencias ambos proyectos.
Presentamos un pedido de informe, en el marco del tratamiento del Presupuesto, a la presidencia del CD, para que la Intendencia presente el padrón de los grandes contribuyentes del municipio, así como las exenciones de impuestos con que se los beneficia. Sin embargo, el presidente Torres, con la complicidad de los concejales de la Comisión de Hacienda, ha rehusado enviar el pedido de informes a la Intendencia para obligar a Corimayo a informarnos.
En defensa del bolsillo del trabajador, rechazamos este presupuesto y el próximo año exigiremos la discusión de la Ordenanza tributaria y la derogación del impuestazo.