Luz verde para un proyecto que propone un cupo femenino en empresas petroleras.
Un proyecto de ley que propone establecer un cupo mínimo de mujeres del 30% -en un plazo de 8 años- en empresas públicas y privadas del sector hidrocarburífero consiguió dictamen favorable de las comisiones de Trabajo y Banca de la Mujer del Senado de la Nación. La iniciativa fue presentada por la senadora kirchnerista Nanci Parrilli (Neuquén) y cuenta, también, con la firma de otros 32 senadores de diferentes bancadas.
Una de las senadoras que acompaña la iniciativa, la representante salteña Sonia Escudero, explicó que “es una medida de discriminación positiva que busca garantizar la igualdad de oportunidades, en particular en aquellos ámbitos en los que las mujeres han sido históricamente marginadas”, en tanto que además pidió “cuidar que el cupo que propone esta norma no se concentre en las tareas de limpieza y cocina, sino que se complete en forma equitativa en los diferentes sectores”.
El proyecto sostiene que la incorporación de mujeres deberá ser gradual, a medida que se vayan produciendo vacantes, y progresiva de tal modo que se alcance un 10 % de mujeres durante los tres primeros años de vigencia de la ley, un 10 % más al cumplir el quinto año, y que se llegue al 30 % al cumplir el octavo año. Asimismo, se les exigirá a las empresas la presentación de un informe anual ante el Ministerio de Trabajo y ante las dos Cámaras del Congreso.
Por otra parte, la senadora Escudero advirtió que “la actividad hidrocarburífera en el norte del país, y en la provincia de Salta en particular está virtualmente paralizada, y que no se vislumbran nuevas inversiones en el corto plazo por parte de la reestatizada YPF, a excepción de los anuncios de exploración en el yacimiento de Vaca Muerta en la Patagonia”. Asimismo, la legisladora reclamó cambios en la política de precios para reactivar la producción de gas, ya que “estamos pagando a Bolivia 8 dólares el millón de BTU, mientras que a los que producen en el país se les paga casi cuatro veces menos (2 dólares y medio) lo que sin duda desalienta las inversiones en territorio argentino”.
Por último, Escudero pidió a sus colegas que avancen, también, con un proyecto de su autoría que propone cupos mínimos de mujeres en los directorios de las empresas del estado y en empresas de servicios públicos concesionadas por el gobierno nacional, porque “la realidad demuestra que se está desaprovechando la mitad del talento del país”. El pedido tuvo buena acogida por parte de sus pares de las comisiones de Trabajo y Banca de la Mujer que prometieron estudiar la iniciativa en cuestión.
Una de las senadoras que acompaña la iniciativa, la representante salteña Sonia Escudero, explicó que “es una medida de discriminación positiva que busca garantizar la igualdad de oportunidades, en particular en aquellos ámbitos en los que las mujeres han sido históricamente marginadas”, en tanto que además pidió “cuidar que el cupo que propone esta norma no se concentre en las tareas de limpieza y cocina, sino que se complete en forma equitativa en los diferentes sectores”.
El proyecto sostiene que la incorporación de mujeres deberá ser gradual, a medida que se vayan produciendo vacantes, y progresiva de tal modo que se alcance un 10 % de mujeres durante los tres primeros años de vigencia de la ley, un 10 % más al cumplir el quinto año, y que se llegue al 30 % al cumplir el octavo año. Asimismo, se les exigirá a las empresas la presentación de un informe anual ante el Ministerio de Trabajo y ante las dos Cámaras del Congreso.
Por otra parte, la senadora Escudero advirtió que “la actividad hidrocarburífera en el norte del país, y en la provincia de Salta en particular está virtualmente paralizada, y que no se vislumbran nuevas inversiones en el corto plazo por parte de la reestatizada YPF, a excepción de los anuncios de exploración en el yacimiento de Vaca Muerta en la Patagonia”. Asimismo, la legisladora reclamó cambios en la política de precios para reactivar la producción de gas, ya que “estamos pagando a Bolivia 8 dólares el millón de BTU, mientras que a los que producen en el país se les paga casi cuatro veces menos (2 dólares y medio) lo que sin duda desalienta las inversiones en territorio argentino”.
Por último, Escudero pidió a sus colegas que avancen, también, con un proyecto de su autoría que propone cupos mínimos de mujeres en los directorios de las empresas del estado y en empresas de servicios públicos concesionadas por el gobierno nacional, porque “la realidad demuestra que se está desaprovechando la mitad del talento del país”. El pedido tuvo buena acogida por parte de sus pares de las comisiones de Trabajo y Banca de la Mujer que prometieron estudiar la iniciativa en cuestión.